miércoles, 5 de agosto de 2009

Homonimia

Me acabo de dar cuenta que hace más de seis años, aproximadamente, que vengo escribiendo mal mi propio nombre. Luego de caer en gracia de mi inacabada personalidad, hice culpable a la transliteración de mi brutalidad.
Mi nombre, como podrán advertirlo en todo el blog o comentario que he dejado, es Ferguson. Pero, he aquí que en realidad se escribe Férguson.
Quien pueda responderme dirá: "Ferguson es un apellido escocés. Usted lo adoptó como nombre. No está mal que no le coloque la tilde".
Pero, como estoy culpando a la transliteración, no puedo dejar de culparme por no advertir lo esdrujulísimo de este nombre. Convengamos que en la práctica y estudio de la acentuación castellana, las esdrújulas son las de mas fácil reconocimiento y corrección... por lo visto, este concepto no me quedó muy claro.


Entonces, señores y señoras, a partir de ahora y con viento en popa, este blog será llamado:

"Cosas de Férguson Calviño".

Y toda intervención que sea de mi parte, de aquí en más, llevará la tilde incrustada en ese nombre castellanizado caprichosamente por mi.

Saludos.

Férguson Calviño.

2 comentarios:

Selma dijo...

Hola gracias por tus palabras me sacaste una sonrisa. Te espero y te leo, Besotes de aquellos.

||descascarado dijo...

como no, calviñó. le ponemos el acento.
Algo como un renacimiento o solo será gramatical el tema?