Me acabo de dar cuenta que hace más de seis años, aproximadamente, que vengo escribiendo mal mi propio nombre. Luego de caer en gracia de mi inacabada personalidad, hice culpable a la transliteración de mi brutalidad.
Mi nombre, como podrán advertirlo en todo el blog o comentario que he dejado, es Ferguson. Pero, he aquí que en realidad se escribe Férguson.
Quien pueda responderme dirá: "Ferguson es un apellido escocés. Usted lo adoptó como nombre. No está mal que no le coloque la tilde".
Pero, como estoy culpando a la transliteración, no puedo dejar de culparme por no advertir lo esdrujulísimo de este nombre. Convengamos que en la práctica y estudio de la acentuación castellana, las esdrújulas son las de mas fácil reconocimiento y corrección... por lo visto, este concepto no me quedó muy claro.
Mi nombre, como podrán advertirlo en todo el blog o comentario que he dejado, es Ferguson. Pero, he aquí que en realidad se escribe Férguson.
Quien pueda responderme dirá: "Ferguson es un apellido escocés. Usted lo adoptó como nombre. No está mal que no le coloque la tilde".
Pero, como estoy culpando a la transliteración, no puedo dejar de culparme por no advertir lo esdrujulísimo de este nombre. Convengamos que en la práctica y estudio de la acentuación castellana, las esdrújulas son las de mas fácil reconocimiento y corrección... por lo visto, este concepto no me quedó muy claro.
Entonces, señores y señoras, a partir de ahora y con viento en popa, este blog será llamado:
"Cosas de Férguson Calviño".
Y toda intervención que sea de mi parte, de aquí en más, llevará la tilde incrustada en ese nombre castellanizado caprichosamente por mi.
Saludos.
Férguson Calviño.
2 comentarios:
Hola gracias por tus palabras me sacaste una sonrisa. Te espero y te leo, Besotes de aquellos.
como no, calviñó. le ponemos el acento.
Algo como un renacimiento o solo será gramatical el tema?
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